EL CÍRCULO DE DECISIÓN
¿Qué podemos controlar y qué no? ¿A dónde enfoco mi atención? ¿Será que puedo hacerme cargo de todo y de todos?
Una forma de perder el control de nuestra vida es creer que no tenemos el control de nada. Y bueno no tenemos el control de todo pero sí de muchas cosas como por ejemplo de:
mis reacciones.
de mi círculo íntimo.
de cómo invierto el tiempo.
de la gestión de mis pensamientos.
Así que vamos a aprender a enfocarnos en todo lo que podemos hacernos a cargo.
Una forma de lograr controlar nuestras emociones es identificar lo que estamos sintiendo, una forma de hacerlo es:
Escribir en un papel la emoción y su significado, así puedes saber exactamente lo que estás sintiendo y por lo tanto cómo hacer para sentir esa emoción y atenderla.
Las emociones vienen y van esa es su función. Nosotros somos quienes a través del pensamiento las dejamos ancladas. Así que a tomar control de lo que estamos sintiendo. Viviendo cada una de ellas. No te pueden hacer daño por si solas.
Conócelas.
Ubícalas en tu cuerpo.
Déjate sentirlas.
Cuando aprendemos a soltar y a dejar de querer controlarlo todo, que de por si no podemos, somos libres.
Libres para:
Amar.
Enfocarnos en nosotros.
Tener relaciones sanas.
Dedicar tiempo a las personas que queremos.
Disfrutamos más de la vida en sí.
Acá les recuerdo 5 cosas que no podemos controlar.
1. Mi pasado.
2. La opinión de los demás.
3. Que alguien me ame.
4. La forma de mi cuerpo.
5. Que alguien me perdone.
Dejemos ir y hagámonos cargo de lo que sí podemos.
Cuánto daño nos hacen los debería, la opinión de otros sobre mí y el poder que le doy a esas palabras. Así como el perfeccionismo que me impongo.
La verdad es que entre más pronto me deshaga de esas 3 cosas más rápido estarás en control de tu vida y bienestar.
No todo se puede controlar pero muchas cosas sí.
Lo que piensas.
Lo que sientes.
Lo que haces.
Invierte tus recursos en eso.
Acá les dejo un libro descargable, para recordar todo lo que sí puedo controlar con mis decisiones.